Beryl tocó tierra estadounidense la madrugada del lunes en la costa de Texas, cerca de Matagorda, a unas 85 millas (137 kilómetros) al suroeste de Houston, como un huracán de categoría 1. A eso de las 4 de la mañana, hora central de Estados Unidos, el ciclón comenzó a azotar la costa texana con vientos máximos sostenidos de 80 millas (128,7 km) por hora, y, pocas horas después, ya había dejado sin luz a más de 2 millones de residentes, la gran mayoría de ellos en el sureste del Estado de Houston.
La primera muerte en Texas atribuida a Beryl ocurrió en Harris County, Houston: un hombre de 53 años murió después de que un árbol cayera sobre su casa.
Una mujer de 74 años es la segunda víctima del huracán que se debilitó a tormenta tropical tras azotar el estado este lunes, informó Ed Gonzalez, sheriff del condado Harris.