Un estudio de la Universidad de Stanford, de Estados Unidos, reveló que los noctámbulos que duermen hasta tarde son los más propensos a desarrollar un trastorno de salud mental. En una encuesta realizada a casi 74 mil adultos los investigadores compararon el horario de sueño preferido de los participantes –conocido como cronotipo– con su comportamiento.
Los científicos determinaron que, independientemente de la hora preferida de acostarse, todos se benefician de ir a dormir temprano. El estudio, publicado en Psychiatry Research en mayo pasado, recomienda apagar las luces a la 1 a.m.
Entre los 73 mil 880 participantes, 19 mil 65 se identificaron como del tipo matutino; 6 mil 844 del tipo vespertino y 47 mil 979 del tipo intermedio. A los tipos nocturnos que siguieron un horario más temprano les fue mejor. Los matutinos que seguían un horario más tardío no la pasaron tan bien, pero no sufrieron demasiado. Mientras que quienes iniciaron actividades con el sol tuvieron la mejor salud mental de todas.
Según los resultados, tanto las personas que suelen despertarse temprano como los noctámbulos tendían a tener tasas más altas de trastornos mentales y de conducta si se quedaban despiertos hasta tarde.
Los noctámbulos que eran fieles a su cronotipo tenían entre un 20% y un 40% más de probabilidades de haber sido diagnosticados con un trastorno de salud mental, en comparación con los noctámbulos que seguían un horario de sueño temprano o intermedio. «El peor de los casos es, sin duda, que la gente trasnochada se quede despierta hasta tarde», dijo Zeitzer.
Los científicos también estudiaron la posibilidad de que fuera una mala salud mental la que provoca que las personas se quedaran despiertas hasta tarde, y no al revés. Los investigadores realizaron el seguimiento de un subconjunto de participantes sin diagnósticos previos de trastornos mentales. El seguimiento del subconjunto reveló que, los noctámbulos que dormían hasta tarde eran los más propensos a desarrollar un trastorno de salud mental.
Si bien el estudio permitió demostrar el daño a la salud mental, causado por dormir tarde, las razones aún son desconocidas. Una teoría, conocida como la hipótesis de la “mente después de medianoche”, sugiere que los cambios neurológicos y fisiológicos a altas horas de la noche pueden fomentar la impulsividad, el estado de ánimo negativo, el deterioro del juicio y una mayor asunción de riesgos.
De acuerdo con Academia Americana de Medicina del Sueño (AASM, por sus siglas en inglés), el tiempo del sueño depende de la edad de las personas:
Los bebés de 4 meses a 12 meses deben dormir de 12 a 16 horas cada 24 horas (incluidas las siestas).
Los niños de 1 a 2 años deben dormir de 11 a 14 horas cada 24 horas (incluidas las siestas).
Los niños de 3 a 5 años deben dormir de 10 a 13 horas cada 24 horas (incluidas las siestas).
Los niños de 6 a 12 años deben dormir de 9 a 12 horas cada 24 horas.
Los adolescentes de 13 a 18 años deben dormir de 8 a 10 horas cada 24 horas.
Los adultos deben dormir 7 horas o más por noche.
Te puede interesar: Fármaco usado para adelgazar, puede hacerte perder la vista
FFO