La delegación china ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) ha ampliado su demanda contra Canadá en el seno del organismo, presentada en septiembre de 2024 por la imposición de aranceles a las exportaciones chinas, después de que Ottawa anunciara tarifas adicionales a las ya en vigor.
La ampliación de la demanda concierne a los aranceles adicionales a las exportaciones chinas de baterías, semiconductores, productos relacionados con energía solar y minerales críticos, informaron fuentes próximas a la OMC.
Con esta actualización, China vuelve a conceder a Canadá 60 días para la celebración de consultas bilaterales con el fin de intentar resolver el contencioso.
Si pasado este tiempo no se alcanzan acuerdos, está facultada para demandar a la OMC la formación de un panel que decida si las medidas canadienses cumplen o no las normativas comerciales de la organización, abriendo un proceso que podría prolongarse varios años.
En otoño de 2024 Canadá ya fijó aranceles del 100 % a la importación de vehículos eléctricos chinos, así como otro del 25 % al acero y aluminio procedentes del gigante asiático, decisión a la que respondió China con la demanda inicial ante la OMC ahora ampliada, además de con aranceles contra productos canadienses.
La imposición de aranceles mutuos por parte de Pekín y Ottawa se produce en un contexto de agravamiento de la guerra comercial entre Estados Unidos y algunos de sus principales socios comerciales, incluidos China y Canadá.