Las intensas lluvias que han azotado la prefectura de Ishikawa, en el centro de Japón, han dejado un saldo trágico de un muerto y diez desaparecidos. Desde la mañana del sábado, la localidad de Wajima ha experimentado precipitaciones récord de 120 milímetros por hora, lo que ha desencadenado desbordamientos de ríos y corrimientos de tierra. La localidad de Suzu, en la península de Noto, ha sido particularmente afectada, con reportes de personas arrastradas por las aguas y otras atrapadas bajo la tierra.
El Gobierno de Ishikawa ha emitido la máxima alerta por lluvias, previendo que las condiciones climáticas adversas persistan. Además, se estima que alrededor de 5,300 hogares en Wajima, Suzu y Noto han sufrido cortes de luz. Las severas inclemencias han llevado a la suspensión de servicios de tren bala y el cierre de varias autopistas y carreteras, complicando aún más las labores de rescate y asistencia en las zonas afectadas.