El presidente Gustavo Petro anunció este martes la declaratoria de emergencia sanitaria y económica ante el brote de fiebre amarilla que ha dejado al menos 32 muertos en el país. El mandatario advirtió sobre la rápida propagación del virus, transmitido por el mosquito Aedes Aegypti, y anunció un plan masivo de vacunación para contener su avance.
“Voy a decretar la emergencia económica, después de la sanitaria. No por lo que dicen los contrabandistas o petroleros, sino por algo simple: la vida”, afirmó Petro en un mensaje publicado en su cuenta de X.
El foco inicial del brote fue detectado en Villarrica (Tolima), en la zona boscosa de Galilea. Desde allí, el virus se ha extendido a municipios como Dolores, Cunday, Icononzo y Melgar, donde ya se han vacunado más de 200.000 personas con apoyo de hospitales públicos, EPS y alcaldías.
Según Petro, los casos confirmados en humanos ascienden a 74, con una mortalidad del 43,2% en 2025. La fiebre amarilla, que afecta principalmente a zonas tropicales, tiene una tasa de letalidad de hasta el 50% en poblaciones no vacunadas.
El Gobierno prepara una campaña masiva de inmunización, utilizando más de 18.000 escuelas veredales como centros de vacunación para niños, docentes y residentes rurales. Petro hizo un llamado urgente a la población, especialmente a adultos mayores no vacunados, a evitar viajes a zonas de riesgo como la región cafetera.
“Si hacemos rápido la vacunación, el número de víctimas será mínimo”, aseguró. Sin embargo, reconoció que solo dos hospitales en el país cuentan con equipos especializados para tratar la enfermedad, por lo que se requieren recursos adicionales.