Ante la noticia de la muerte del Papa Francisco, muchos fieles católicos recordarán cuando imágenes de él resistiéndose a que feligreses besaran su anillo se hicieron virales en 2019. Dicho anillo del papa vuelve a tomar relevancia una vez más, pues esta joya deberá ser destruida.
Esto marca oficialmente el final de un papado y da inicio al periodo conocido como Sede Vacante, en el que la Iglesia se prepara para elegir a un nuevo pontífice.
Pero ¿de qué se trata esta tradición y qué significado tiene este accesorio?
Qué simboliza el anillo del papa y por qué se destruye
El llamado ‘Anillo del Pescador’ es una joya que simboliza la autoridad del Papa como sucesor del apóstol San Pedro, quien, según la tradición cristiana, fue el primer pontífice y de oficio pescador.
De ahí proviene el nombre de este anillo que se entrega a cada Papa al inicio de su pontificado.
Según explica el medio español Heraldo.es, en la antigüedad este anillo se usaba para sellar con cera roja los documentos oficiales del Vaticano. Con el paso del tiempo, su uso pasó a ser principalmente ceremonial, pero sigue teniendo un alto valor simbólico dentro de la Iglesia Católica.
Cuando un Papa fallece, el anillo debe ser destruido. Esta tradición busca evitar que se utilice el sello papal durante el periodo de transición entre pontificados.
De acuerdo a David Collins, profesor y director de estudios católicos de la Universidad de Georgetown para NBC News, el responsable de esta tarea es el camarlengo, quien rompe el anillo, usualmente golpeándolo con un pequeño martillo de plata, como una señal formal del fin del mandato papal.
Además, se indica que los restos del anillo pueden ser fundidos y reutilizados en la fabricación del anillo del próximo Papa, como signo de continuidad.
La joya del Papa Francisco era diferente
En su estilo característico de sencillez, el Papa Francisco optó por un anillo diferente al de sus predecesores. En lugar de uno de oro macizo, eligió uno de plata dorada, como una forma de rechazar el lujo.
Según informó La Vanguardia, la pieza fue diseñada por el escultor italiano Enrico Manfrini y representa a San Pedro con las llaves del Reino de los Cielos, un símbolo tradicional del papado.
Además, Francisco no fue visto con frecuencia usando el anillo. Tal como reportó el medio especializado InfoVaticana, el pontífice prefería un anillo más simple que llevaba desde su época como arzobispo en Buenos Aires.
Este gesto reflejaba su coherencia con un papado enfocado en la austeridad, la cercanía y el rechazo a los ornamentos excesivos.