Julio César Chávez Jr, próximo a su reaparición en el boxeo, ha revelado que los períodos de «encierro» como parte de su rehabilitación por adicciones le dejaron un trauma. A pesar de haber superado problemas personales que lo llevaron a prisión en Estados Unidos y agradecer el apoyo de su padre, Julio César Chávez, el boxeador mexicano considera que esa modalidad de tratamiento no fue la más adecuada.
Chávez Jr está programado para enfrentar a Darren Till el 20 de julio en Texas como parte de una cartelera que incluye a figuras destacadas como Mike Tyson y Jake Paul. El pugilista fue detenido a principios de 2024 en Los Ángeles por posesión ilegal de un arma, tras lo cual ingresó a un programa de rehabilitación por adicciones. En una entrevista con TUDN, Chávez Jr admitió que ya enfrentaba problemas antes de su detención, consumiendo pastillas para bajar de peso, y señaló que los «encierros» en México agravaron su situación emocional.