La presidenta Claudia Sheinbaum firmó el decreto que oficializa la creación de las Empresas Públicas del Estado, consolidando a Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) bajo un nuevo esquema legislativo. Con este cambio, ambas empresas dejan de ser consideradas monopolios y operarán bajo un régimen especial que les otorga autonomía financiera y de gestión.
Durante la conferencia matutina, la mandataria anunció el envío de un paquete de leyes secundarias en materia energética al Congreso, cuyo propósito es revertir las reformas neoliberales implementadas desde 1992, que promovieron la privatización del sector.
Luz Elena González, titular de la Secretaría de Energía (SENER), explicó que la iniciativa se basa en seis leyes principales:
- Ley de Planeación y Transición Energética
- Ley de la Empresa Pública del Estado, CFE
- Ley del Sector Eléctrico
- Ley de la Empresa Pública del Estado, Pemex
- Ley del Sector de Hidrocarburos
- Ley de la Comisión Nacional de Energía (CNE)
Estas normativas permitirán que Pemex y CFE cuenten con un régimen especial en el manejo de su presupuesto, contabilidad y deudas, así como establecer metas anuales enfocadas en la seguridad energética del país.
CFE y el concepto de justicia energética
Dentro del nuevo marco legal, la CFE proyecta una inversión de 24,300 millones de pesos y se incorpora el concepto de justicia energética, el cual busca garantizar el acceso equitativo a la electricidad sin fines de lucro.
Entre los principales puntos de la reforma para la CFE destacan:
- Mantener la prevalencia del 54% en la inyección de energía a la red nacional.
- Establecer tarifas que no superen el índice de inflación.
- Regular la participación privada para evitar prácticas monopólicas.
Pemex: nuevo régimen fiscal y control de la industria
En cuanto a Pemex, la reforma le otorga prioridad en la determinación y elección de asignaciones, además de fortalecer su capacidad operativa. Algunos de los cambios más relevantes incluyen:
- Rescate de la industria petroquímica y de fertilizantes.
- Simplificación del régimen fiscal y del derecho petrolero.
- Autorización para invertir en nuevas tecnologías para la explotación de yacimientos.
- Control de los permisos otorgados a empresas privadas.
Creación de la Comisión Nacional de Energía
Como parte de la reforma, se establece la Comisión Nacional de Energía (CNE), un organismo desconcentrado de la SENER con independencia técnica y operativa. Sus funciones incluyen:
- Otorgar permisos para generación y distribución de electricidad.
- Supervisar el mercado eléctrico mayorista y establecer tarifas.
- Regular la cadena productiva de gas natural, petrolíferos y petroquímicos.
Eliminación de empresas subsidiarias
Otro de los cambios destacados es la desaparición de las empresas subsidiarias dentro de Pemex y CFE. Luz Elena González detalló que estas entidades operaban como si fueran privadas dentro de las empresas estatales. “En el caso de Pemex, había tres empresas subsidiarias y casi 50 filiales”, explicó.
La propuesta de reformas será enviada al Congreso para su análisis y discusión en las próximas sesiones legislativas.