En noviembre de 2024, la tasa de desempleo en México se situó en el 2.6 % de la Población Económicamente Activa (PEA), un ligero aumento respecto al 2.5 % registrado en octubre, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Este incremento dejó a 1.6 millones de personas sin empleo, divididas en 705,000 mujeres y 921,000 hombres.
El Inegi reportó que el 41.2 % de las personas desempleadas estuvieron en esta condición por un mes o menos, mientras que el 36.4 % permaneció sin empleo hasta tres meses. La mayor proporción de desempleados, el 43.5 %, corresponde a personas de entre 25 y 44 años, reflejando la vulnerabilidad de este grupo etario en el mercado laboral.
POBLACIÓN ECONÓMICAMENTE ACTIVA
En noviembre, la PEA alcanzó los 61.6 millones de personas, lo que representa una participación laboral del 60 % entre individuos de 15 años o más. De este total, 60 millones de personas estuvieron ocupadas, equivalente al 97.4 % de la PEA.
Entre la población ocupada:
69.2 % trabajaron como subordinados y remunerados, ocupando plazas o puestos de trabajo, con un incremento anual de un millón de personas en esta categoría.
21.6 % se desempeñaron de manera independiente, sin emplear a terceros.
5.9 % actuaron como empleadores.
3.3 % colaboraron en negocios o parcelas familiares, contribuyendo sin recibir una remuneración directa.
Subocupación
El informe también destacó que 5.3 millones de personas, es decir, el 8.9 % de la población ocupada, expresaron necesidad y disponibilidad para trabajar más horas, subrayando desafíos persistentes en la calidad del empleo.
Distribución por sectores económicos
Por sector de actividad, la ocupación se distribuyó de la siguiente manera:
44.1 % en servicios.
19.8 % en comercio.
16.4 % en la industria manufacturera.
Estos datos reflejan la estructura económica del país, donde los servicios siguen siendo el principal motor de empleo.
En resumen, aunque México mantiene una baja tasa de desempleo en comparación con otras economías, el ligero aumento registrado en noviembre de 2024, junto con la alta concentración de desempleo en jóvenes adultos y la subocupación, señala áreas críticas que requieren atención para fortalecer el mercado laboral.